Esta sencilla pero llamativa promoción se sitúa en la entrada principal de Yecla, en un espacio donde antaño se ubicaba la “Cerámica” de este municipio. Es un edificio que no deja indiferente a nadie, que transmite a propios y visitantes un estallido de color nada más acceder a la ciudad.

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Desde el planteamiento inicial se buscaba abrir los edificios y la plaza a la ciudad, para evitar los clásicos patios de manzana, y así obtener una excelente iluminación y vistas al paisaje para los habitantes de sus viviendas.

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A nivel de funcionamiento interno del edificio se trató de dar a todas las viviendas fachada delantera y trasera, de forma que la zona de día se volcara hacia la plaza y la zona de noche diera a las calles traseras con menos ajetreo. También el diseño del aparcamiento subterráneo fue muy cuidado para evitar los clásicos problemas de maniobras y asegurar así el buen funcionamiento diario de vehículos.

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Como resumen, una propuesta ATREVIDA para unos habitantes con ENERGÍA.